Capítulo 7:

Cuando salimos nos fuimos a cenar un burguer, Dani y Carolina no paraban de darse besos y estar muy acaramelados, no podía evitar mirar con resentimiento, aunque lo intentara ocultar. 

 

***

Cuando terminamos nos fuimos a una discoteca que había cerca, parecía estar muy bien y era muy grande. 

Allí estaban los amigos de David; Marc y Héctor.

Por un lado me lo estaba pasando bien con los chicos, pero por otro observaba a Dani y a Carolina que no paraban de comerse la boca uno al otro, sentía celos, muchos, así que opté por invitar a los chicos a una ronda de chupitos, que yo lo traducía a una ronda 'quita penas'.  

Pero detrás de esa ronda vinieron otras cuantas más, hasta que todos llevabamos un buen pedo, me fuí al baño a vomitar, era realmente asqueroso, cuando salí no encontraba a los chicos, así que decidí irme a casa sola, a duras penas llegué, no tenía llaves así que me senté en el portal a esperar, o a sabe dios qué, porque mi padre se había ido a la sierra y yo con las prisas no había cogido las llaves de casa, casi me quedo dormida, tenía los ojos casi cerrados ya, y además la claridad empezaba a molestarme, de repente vi como alguien me estaba llamando, abrí los ojos y vi como Dani intentando aguantar la risa me levantaba, yo todavía estaba mareada, no hablaba, tampoco quería, estaba molesta con él, nos metimos en el ascensor, yo miraba para el techo, apoyada contra un lateral, cuando salimos yo me senté en las escaleras al lado de mi casa, Dani se giró y me preguntó si es que no iba a entrar en mi casa, yo le contesté que se me habían quedado dentro y que mi padre hasta mañana por la noche no vendría, así que no sabía que hacer.

Dani me invitó a que pasara a su casa, yo al momento me negué, pero después de casi diez minutos asintiendo al final accedí, me dijo que me podía quedar en la habitación que tenía libre, yo asentí, ni le miraba a la cara, era mirarle y recordar nuestro beso, y después el beso de él y carolina, y eso me dolía. 

Me dejó una camiseta ancha de él y me fuí a dormir.

Al día siguiente eran casi las tres de la tarde cuando me desperté, salí al pasillo para ir al baño, tenía una resaca horrible y lo único que quería era ir al baño a vomitar y desprenderme de toda esa mierda, era insoportable, sentía mi cabeza retumbar y tenía mucha sed, todo me daba vueltas.

Cuando me dirigía al baño pasé por el salón y empezé a oir unas risas, me giré y vi que allí estaban David, Carlos, Dani y Blas, solo llevaba la camiseta de Dani y la ropa interior, fue un momento incómodo, rapidamente me metí en el baño, y me pusé a vomitar, tocaron la puerta y era Álvaro, como siempre preocupandose por los demás, me preguntó si me sentía bien, yo le dije que sí, que simplemente era resaca, cerró la puerta y se fué.

Después de acabar de vomitar, pasé por el salón y otra vez las puñeteras risas, así que me giré y simplemente les dije "¿Nunca habéis visto una tía en bragas o qué?" Cerré la puerta de la habitación y me vestí, tocaron la puerta y era David, le dejé pasar y se sentó a un lado de la cama, yo estaba pálida.

David: ___, siento si te ha molestado lo de las risas, no iba de malas, solo que tienes un cuerpo muy bonito. 

_____: No pasa nada David, lo siento por ser tan borde, pero la resaca me mata, enserio.

El se río y me dió un abrazo, salí y saludé al resto, les pedí disculpas y ellos también, me senté al lado de Carlos, que estaba con el móvil y pues yo miraba para la ventana, con un punto muerto, estaba en mi mundo, hasta que tocaron el timbre y era Carolina, ag, otra vez la situación de ayer viéndolos tan acaramelados me sentaba fatal, la saludé y me salí a la terraza, deseaba que llegaran mi padre y Silvia para poder irme de ahí, era una situación demasiado incómoda, de repente ví como Carlos me llamaba desde el salón, fuí ahí y vi que era mi madre que me estaba llamando al móvil, salí a fuera y me puse a hablar con ella, me dijo que dentro de una semana me volvería a Galicia, en ese momento una lágrima cayó por mi mejilla, iba a echar de menos todo esto, a mi hermana, mi padre, Silvia, los chicos, y también a Dani. Paré de hablar con mi madre y me metí para dentro, fuí a la habitación donde había dormido e intentando disimular mis lágrimas me fuí, los chicos se quedaron preocupados, pero antes de que pudieran decir nada me fuí, me senté en un banco de un parque cercano a mi casa, observaba a la gente, al fondo un puñado de ancianos hablando entre ellos, para el otro lado unos niños jugando con una pelota, y al fondo una pareja dándose arrumacos, en ese momento me sentí la persona más sola del mundo, pronto se hizo de noche y por suerte mi padre y Silvia ya estaban allí, cuando llegué me preguntaron si no me importaba quedarme a cargo de 

Diana esa noche ya que ellos iban a celebrar sus 10 años de noviazgo, les dije que no había problema, así que me fuí a cambiar y me puse mi pijama, que era una camiseta básica blanca con unos shorts de pijama rojos. 

Mi padre y Silvia se fueron así que yo le preparé el baño a Diana, la bañé, me había puesto pérdida de agua, tocaron en timbre, dejé a Diana un momento en el salón y fuí a abrir.

Para mi sorpresa era Dani, y traía una bolsa con comida del McDonald, lo invité a pasar, se reía un poco de mí, ya que mis pintas no eran las más indicadas para quien me viera, nos dirigimos al salón, el se sentó, yo cogí a Diana para darle el biberón mientras le preguntaba a Dani que era lo que hacía ahí, el me dijo que se había preocupado por como había salido esa tarde de mi casa, yo simplemente negué y le dije que era que me encontraba mal por la resaca que tenía, no parecía muy convencido pero al final accedió, abrió la bolsa del Mcdonals y empezamos a comer, me manché, entera, era una patosa, pero me daba igual, nos reímos muchísimo mientras comíamos, cuando terminamos de cenar decidí poner una película y nos vimos una de miedo, Diana ya estaba dormida, así que la dejé durmiendo en su habitación y puse el walkie-talkie en el salón por si acaso pasaba algo.

Nos sentamos, a lo largo de la película, yo cada vez estaba más asustada, odiaba demasiado las películas de miedo, inconscientemente me iba acercando cada vez más a Dani, a estar en su regazo, cuando terminamos la película yo la verdad lo había pasado mal, me levanté para ir a ver que tal estaba Diana, estaba bien así que me volví al salón, Dani se iba a ir ya, pero institivamente le dije:

"Quédate, mis padres todavía tardaran bastante en venir".